Permitirán acciones no votadas por la Asamblea Ambiental.

Cheque en blanco. En una larga y debatida sesión, la Asamblea Ambiental votó anoche una metodología de trabajo que incide directamente en sus principios de funcionamiento. Se dio carta blanca o “voto de confianza” para que quien manifieste tener en proyecto una acción secreta pueda realizarla con dos o tres (o cuantos quiera) ayudantes seleccionados por él, sin que nadie más esté enterado de lo que se hará, ni cuándo ni cómo. Y será en nombre de la Asamblea.o
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La propuesta demandó toda la sesión. La Asamblea regresó anoche al Teatro Gualeguaychú, con una asistencia de aproximadamente 200 personas. Coordinó José Gómez.
El tema en debate fue: existen acciones que, para ser efectivas, deben ser secretas. Sorpresivas totalmente (hasta allí, todos de acuerdo). Para ello, no pueden ser debatidas en sesión abierta como la de anoche. Por tanto, se necesita un “voto de confianza” para que el asambleísta que manifieste tener una acción en mente pueda realizarla y elija a sus colaboradores “de confianza” (valga la redundancia).
Todos aceptaban que el efecto sorpresa es importante. Pero: ¿el voto de confianza también hace falta? Las posturas, en gruesas pinceladas, fueron dos:
1 – Sí, porque “todos nos conocemos, aquí nadie es un loquito ni violento, no vamos a proponer acciones desmesuradas; el que va a realizar una acción secreta debe venir primero y dar la cara, y la Asamblea le dirá que sí o que no (al voto de confianza, no a la acción, porque no la conoce)”. Además, a las sesiones de la Asamblea suelen ir “los servicios” (esto es, agentes de información de Policía, Prefectura, Gendarmería, la SIDE y de la empresa Botnia) por lo que si todas las acciones se debaten allí, pueden ser sofocadas de antemano o arruinadas por carecer de sorpresa. “Kirchner no nos cuenta lo que va a hacer, actúa en silencio, y Botnia avanza”, se dijo.
2 – No, porque actuar de esa forma (voto de confianza y desconocimiento del resto) va en contra de las bases mismas de la Asamblea: horizontal, donde todos participan, todos opinan. Las horizontalidad de la Asamblea ha sido la principal característica de este movimiento. Las acciones secretas son necesarias, pero pueden ser tratadas, estudiadas y autorizadas por un grupo, una comisión de acciones (que funcionó en 2006 y ahora se encuentra desactivada). Quien tiene una propuesta de acción secreta, puede plantearla a la comisión mencionada. De esa forma, habrá un tamiz y un reaseguro para el resto. La comisión de acciones podrá autorizar que esa persona lleve adelante el proyecto.
Para los primeros, si una comisión conoce la propuesta puede filtrarse y romperse la sorpresa y efectividad. Y no hay por qué comentar ideas con las fuerzas de seguridad.
Para los segundos, es demasiado riesgoso permitir que quien quiera, lleve adelante acciones que el resto desconoce. Y en todas las acciones encaradas hasta el momento, se ha contado con el conocimiento y el apoyo de fuerzas de seguridad. Además, “las mejores acciones nuestras fueron las más promocionadas antes, como las marchas”.
Conclusión: se autorizó el cheque en blanco.