lunes, 26 de noviembre de 2007


Asambleístas retoman la idea de pasar al balneario Las Cañas.

La asambleísta de Colón Silvia Echevarría, dijo que a las 9,30 comenzó a normalizarse el tránsito por el puente hacia Paysandú, ya que se había formado unos tres kilómetros de cola de camiones. Adelantó además que en las próximas horas, junto a asambleístas de Concordia y de Gualeguaychú, analizarán los pasos a seguir.En tanto, desde Concordia el asambleísta Luis Román dijo que tras la apertura del puente, “sigue en pie la idea de pasar al balneario Las Cañas”, ubicado en Fray Bentos.“Pasaremos en las próximas horas, o pasaremos el domingo”, dijo Román.Los puentes de Paysandú-Colón y Salto-Concordia, fueron liberados a las 9,30 de este lunes.Durante la noche, asambleístas entrerrianos se quedaron en carpas.En el amanecer del lunes, la frontera argentino-uruguaya mostraba una imagen clara del conflicto, con los tres puentes cerrados por efectivos de Prefectura del Uruguay, y con grupos de asambleístas vigilados por Gendarmería Nacional en las cabeceras argentinas.Todo se originó en la decisión de la Asamblea Ciudadana Ambiental Gualeguaychú de realizar este domingo una movilización hacia el balneario Las Cañas, en Fray Bentos, al lado de la planta de Botnia, tras lo cual los puentes se fueron cortando uno a uno desde el Uruguay.En Concordia, que fue el último de los puentes en los cuales se cortó el paso, asambleístas entrerrianos resolvieron quedarse a la vera de la ruta 015, en la cabecera argentina del puente que va hacia la ciudad uruguaya de Salto.Los asambleístas comenzaron al atardecer del domingo a armar carpas para pasar la noche, según indicó el asambleísta de Gualeguaychú Jorge Fritzler, quien participa de la acción en Concordia.Mientras tanto, la Asamblea Popular Ambiental de Colón, que tenía previsto levantar a las 19 el bloqueo de la ruta internacional 135, resolvió también quedarse en el lugar de protesta, anunció la asambleísta Silvia Echevarría.En el caso de Colón, la Asamblea que suele realizar cortes y otros protestas, tiene en el lugar un refugio para quienes pasen la noche.El puente internacional General San Martín, entre Gualeguaychú y Fray Bentos, está vallado desde el Uruguay y a la vez asambleístas entrerrianos cortan la ruta internacional 136 desde hace más de un año.Unos 120 kilómetros al norte se ubica el puente Colón-Paysandú, y por ruta nacional 14, a algo más de cien kilómetros hacia el norte, se llega a Concordia y desde allí a la ruta internacional 015, que va al puente Concordia-Salto, que este domingo al mediodía fue cerrado por la Prefectura del Uruguay y posteriormente abierto este lunes a las 9,30.


Taiana envió al cónsul argentino a labrar un acta en el puente.

El canciller Jorge Taiana instruyó este domingo al cónsul argentino en la ciudad uruguaya de Salto, Raúl Guerrero, para que se dirija al sitio donde las autoridades de Uruguay decidieron interrumpir el tránsito del puente que comunica con Argentina, con el propósito de interiorizarse sobre la situación.Guerrero fue a la zona y "se puso a disposición" de los argentinos que buscaban retornar al país El paso internacional que comunica esa localidad entrerriana con la vecina oriental de Salto fue clausurado por Montevideo. Fuentes de la Cancillería confiaron a Télam que el representante diplomático labró un acta ante escribano público uruguayo sobre el corte en la frontera y "se puso a disposición" de los argentinos que buscaban retornar al país.


Botnia hizo caer importantes inversiones turísticas en Gualeguaychú.

El secretario de Turismo de Gualeguaychú, Sebastián Bel, evaluó que la presencia de la planta Botnia sobre el río Uruguay afectó las inversiones en infraestructura hotelera, aunque señaló que se mantuvo el crecimiento del turismo en la región. “La inversión en hotelería e infraestructura se paralizó tras el avance de Botnia”, sostuvo el titular de la cartera turística de Gualeguaychú. Es “la inversión” y no el “turismo” el sector que más siente “el efecto de la presencia de Botnia frente a las costas de Gualeguaychú”, aseguró el funcionario. “El turismo viene creciendo a un ritmo del 8 % en los últimos cuatro años, cifra significativa si se tiene en cuenta que el turismo en Entre Ríos aumentó 6 % y en la Argentina 4,5 %”, reseñó. En cambio, la inversión se mantuvo estable y se frenaron inversiones millonarias en emprendimientos de categoría, aseguró Bel; quien explicó que “nunca comenzó” la construcción de “dos hoteles cuatro estrellas, que iban a tener 40 habitaciones cada uno, con todos sus papeles ya aprobados”. Según el funcionario, también se paralizó la construcción de un complejo de cabañas con servicio de spa que iba a ocupar una manzana entera frente al puerto de Gualeguaychú. Otro proyecto que quedó trunco fue un complejo habitacional en la playa Ñandubaysal, justo frente a la planta de Botnia. El balneario es la playa más concurrida de Gualeguaychú, con más de 160.000 personas por temporada, y es también la más afectada por la presencia de la pastera, debido a que desde su orilla, a sólo 12 kilómetros de la planta, se ve la chimenea de la planta. En cambio, Bel dijo que siguió creciendo el sector de establecimientos hoteleros más pequeños y sencillos, a un ritmo que permitió que la inversión no se estancara del todo.En ese sentido, el funcionario aseguró que en el año 2003 había 53 complejos, en el 2004 unos 59, en el 2005 había 70, en el 2006 unos 77 y en el 2007 había 97. Bel atribuye esta tendencia a que “todos esperan qué va a pasar con Botnia”, y por lo tanto no se realizan grandes inversiones sino pequeñas, “para absorber el turismo de fin de semana, de verano y, sobre todo, del carnaval”. El carnaval, que en Gualeguaychú empezará el 5 de enero y se extenderá hasta el 15 de marzo, lleva a Gualeguaychú a unas 447.000 personas, que realizan un gasto mínimo de 70 pesos diarios (sólo la entrada al corsódromo cuesta 30 pesos). Bel reiteró que el crecimiento del turismo no fue consecuencia del corte, sino que “es una tendencia que se viene dando en los últimos años debido a la fuerte campaña de promoción que lleva adelante su cartera”, que se basa en el carnaval y las playas, pero que incluye además las termas (hace dos años) y actividades deportivas. “El turismo en Gualeguaychú aumentó en número y en calidad”, y “los cortes en los puentes internacionales no afectaron el turismo” ni para bien ni para mal, sostuvo el titular de la cartera turística de esta ciudad entrerriana. Según dijo, “la gente no viene a Gualeguaychú atraída por el corte ni la chimenea de Botnia”, tampoco se siente una caída en el turismo proveniente de Uruguay porque, en realidad, esta ciudad “no vivía del turismo del país vecino ni dependía de su mercado“.Fuente: El Diario